¿Qué son las tuercas autoblocantes y cómo se utilizan?

Uno de los problemas fundamentales en el mundo de la mecánica: los pernos y tuercas que se aflojan, lo que aumenta el riesgo de accidentes y averías. ¿Qué ocurre si un componente clave de un vehículo, como una rueda, se suelta de repente por culpa de un tornillo flojo? Por eso existen herramientas conocidas como tuercas autoblocantes que pueden ayudarle. Tampoco es la única solución disponible en el mercado.

Si quiere evitar que un elemento roscado se desenrosque, puede utilizar distintas fórmulas. Como, por ejemplo, arandelas partidas antidesenroscamiento u otros métodos para bloquear pasadores y pernos. Sin embargo, en algunos casos esto no funciona.

Entonces necesita certeza y seguridad. En estas circunstancias, puede considerar las tuercas autoblocantes, un referente en las aplicaciones más intensas en las que las fuertes vibraciones aflojan los tornillos.

¿Qué son las tuercas autoblocantes?

Se trata de las clásicas tuercas hexagonales metálicas con un elemento que retiene la tensión. Una vez apretado, este tipo de tornillo permanece en su sitio y puede proporcionar un agarre máximo de la rosca. Estas herramientas, muy utilizadas en ingeniería mecánica, están fabricadas en acero inoxidable resistente a la intemperie o en acero galvanizado.

Para leer: cómo quitar un tornillo pelado

¿Existen diferentes tipos de tuercas autoblocantes?

Algunas son de metal (contratuerca de rosca distorsionada), con una rosca que varía al enroscarla crea la fricción suficiente para impedir que se desenrosque. Otras son las que tienen un inserto de nailon que aplica el mismo principio.

Para ambas soluciones podemos encontrar tuercas autoblocantes con pestaña, una especie de arandela para distribuir bien la presión y una tapa para proteger el tornillo (tornillo ciego). Desde el punto de vista del Deutsches Institut für Normung, también tenemos dos definiciones: DIN 982 son las tuercas hexagonales altas autoblocantes y DIN 985 las tuercas hexagonales bajas que se utilizan cuando es necesario prestar especial atención al tamaño.

Las tuercas K-lock tienen dientes que encajan en materiales como la madera y frenan cualquier movimiento. Para instalaciones de seguridad, se pueden utilizar retenedores con resorte y chavetas, que se pueden doblar después de apretar la tuerca.

¿Por qué merece la pena utilizar estos tornillos?

Una vez apretadas, las tuercas mantienen su posición. Esto se consigue gracias a la presencia de insertos que crean un bloque o calce en la rosca para impedir el movimiento en sentido contrario a las agujas del reloj que desenroscaría el tornillo. Esto siempre será posible, pero sólo ejerciendo fuerza con las herramientas adecuadas.

Tuerca autoblocante con inserto de nailon - Fuente de imagen

Una de las características fundamentales de los pernos antidesatornillado es la reversibilidad de la acción. De hecho, estos elementos se utilizan allí donde es necesario disponer de la máxima seguridad de la fijación, pero no son posibles soluciones definitivas o semipermanentes como la soldadura, el pegamento o el uso de remaches.

Los cerrojos autoblocantes ofrecen seguridad, pero también ahorran mantenimiento y prevén riesgos de robo, ya que impiden que los asaltantes desatornillen rápidamente lo que puedan llevarse.

¿Cuándo se utilizan las tuercas autoblocantes?

En primer lugar, hay que recordar que no es obligatorio elegir siempre estas herramientas. En algunos casos son indispensables, en otros no. ¿Dónde es aconsejable utilizar tornillos antidesatornillado?

Normalmente, estas opciones se utilizan en los sectores de la motorización, la aeronáutica y la construcción naval, donde es necesario garantizar la máxima estanqueidad frente a grandes esfuerzos, vibraciones, torsión y tracción. ¿Por ejemplo?

En un bloque motor, se pueden utilizar tuercas autoblocantes y arandelas partidas para garantizar que las fuerzas del terreno no aflojen la junta. Lo mismo puede utilizarse, por ejemplo, para los pasadores que sujetan las ruedas al eje.

Más información: técnicas para extraer un tornillo roto

¿Cómo se enrosca y desenrosca una tuerca autoblocante?

Para insertar y extraer tuercas autoblocantes con insertos de nylon o metálicos se necesitan algunas herramientas útiles: llaves como las del catálogo de Ineco, insertos de calidad (aquí sugerimos LTI) si se utiliza un atornillador eléctrico.

Tienes que elegir la llave adecuada y girar en el sentido de las agujas del reloj para apretar, y en el sentido contrario para desenroscar. Tendrás que aplicar una buena cantidad de fuerza en términos de par de apriete porque estas tuercas mecánicas están diseñadas para frenar la extracción involuntaria.

Cuando apriete los tornillos autoblocantes, asegúrese de dar la tensión adecuada sin apretar demasiado para evitar que se desprendan los pasadores y espárragos. Si trabaja con tuercas que incluyen lengüetas o chavetas, primero debe retirar estos frenos. ¿Se pueden reutilizar las tuercas autoblocantes? Depende de si se ha dañado el mecanismo o el material. En general, si quiere tener más seguridad, es mejor cambiar las tuercas autoblocantes una vez utilizadas.