Gres porcelánico, características técnicas y estéticas

¿Qué baldosas elegir para renovar la zona transitable de su casa? A la hora de renovar y remodelar una vivienda, hay que elegir distintos materiales para renovar suelos, paredes y otros detalles. A menudo, la solución para muchas superficies lleva el nombre de (súper popular) gres porcelánico.

Es decir, un material de construcción empleado en el sector de la construcción y el interiorismo que se utiliza con gran efecto en revestimientos de suelos y paredes. El gres porcelánico es un tipo de cerámica que se obtiene mediante procesos muy sofisticados. He aquí algunas características estéticas y especificaciones técnicas.

Definición de gres porcelánico

Empecemos con una explicación. El gres porcelánico -del francés grès o ġrè, arenisca- procede de un proceso de fabricación que implica, para simplificar, la selección y el prensado (moldeo en seco o en húmedo) de diversos materiales finamente molidos. Hablamos, en pocas palabras, de arcillas, feldespatos, sílice y otros.

Estos elementos se seleccionan y se tratan con un proceso de greificación. Esto incluye el secado para evitar problemas debidos a la humedad y la soldadura de los gránulos a través de un proceso de cocción a temperaturas muy altas, incluso 1300 grados. El resultado es un gres porcelánico duradero y resistente.

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¿Cuáles son las características técnicas?

¿Sabe por qué este material de construcción es tan popular y se utiliza tanto en la construcción como en la renovación de una casa? Sencillo, los arquitectos y diseñadores eligen el gres porcelánico porque combina estética y funcionalidad.

Empecemos por el último paso: ¿qué hace que este producto sea único desde el punto de vista técnico? En primer lugar, su resistencia a diversos factores como el desgaste, los arañazos, el calor y los productos químicos. Gracias a su composición y proceso de producción, el gres porcelánico puede utilizarse sin temor a los cambios de temperatura, las pisadas y la abrasión.

El gres porcelánico también se utiliza a menudo porque absorbe muy poca agua: es un material que no teme a la humedad, no se mancha ni se abolla, no pierde el color con el tiempo y es fácil de limpiar.

Todo ello sin olvidar el aspecto relacionado con el rendimiento de la decoración. El gres porcelánico puede esmaltarse antes de la cocción, dependiendo del tipo de producto utilizado, para conseguir acabados especiales.

Como las superficies pulidas o apomazadas. Por ejemplo, puede tener un suelo efecto mármol o madera de roble (por poner un ejemplo) con gres porcelánico. O un color liso, con o sin decoración, brillante o tal vez mate. Esto hace que el material en cuestión sea adecuado para cualquier proyecto privado o público.

Cuando se utiliza gres porcelánico

Hablamos de un material que puede utilizarse para cualquier revestimiento de suelos o paredes en el hogar, pero también en entornos empresariales o públicos. Sus características lo hacen ideal en lugares donde hay un alto nivel de humedad como baños o cocinas, y su capacidad para soportar esfuerzos físicos de diversa índole lo hace adecuado para suelos de alto tránsito como pasillos y zonas de paso.

El hecho de que se pueda colocar este tipo de suelo tanto sobre baldosas ya existentes como sobre una base de cemento hace que la colocación sea aún más cómoda y versátil. Además, el gres porcelánico puede perforarse fácilmente

Así que también puede utilizar este material fácilmente en paredes en las que se pueden montar grifos y pomos. Aquí puede echar un vistazo a las puntas Krino adecuadas para este material: las Gresmaster.

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Cómo debe colocarse el gres porcelánico

Aunque el procedimiento es bastante sencillo, la colocación de estas baldosas es una operación delicada y requiere mucha experiencia. Resumamos las etapas a título informativo: en primer lugar, hay que preparar la superficie de base, que debe ser lisa y homogénea. Para ello, en algunas circunstancias se aplica una imprimación.

Una vez preparado el subsuelo, que debe estar limpio y sin grietas, pero perfectamente recto, hay que aplicar el material para fijar las baldosas: adhesivos, morteros de cemento u otros pegamentos pueden utilizarse en función de las necesidades y características del estado. Lo importante es seguir las indicaciones del material elegido para:

• Cubrir paredes.
• Construcción de terrazas exteriores.
• Revestimiento de suelos.

Con el adhesivo aún fresco, las baldosas deben colocarse de forma que se mantenga una distancia uniforme (esto es posible con juntas de dilatación). Es necesario golpear las baldosas para evitar la formación de burbujas de aire entre ellas y el material adhesivo. Antes de rejuntar las juntas, asegúrese de haber limpiado la superficie: detalles que sólo un alicatador profesional puede garantizar mejor.