¿Es posible afilar la broca?
Cuando organices tu caja de herramientas, presta atención a todos los detalles. Asegúrate, por ejemplo, de que tienes las llaves adecuadas para realizar pequeñas tareas de mantenimiento. Por ejemplo, para cambiar un grifo o sustituir una toma de corriente. Luego revisas los compartimentos con más cuidado y descubres que necesitas afilar las brocas. Así es, si quieres mantener alta la eficacia de tu taladro, tienes que asegurarte de que las brocas están a pleno rendimiento. La calidad del trabajo que hagas en tu casa, garaje o jardín depende de este paso.
Pero, ¿merece la pena afilar las brocas o es mejor cambiarlas? ¿Cuál es el límite? Para qué hablar de recuperar las brocas cuando, en principio, estos accesorios no son muy caros. Y al fin y al cabo, los fusibles suelen estropearse y romperse, así que ¿por qué no preservar la eficacia de un taladro comprando un juego de brocas nuevas? Las opciones son diversas, y no siempre es la solución más rentable.
Más información: cómo elegir un taladro de columna
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¿Por qué afilar las brocas?
La razón no es obvia: puedes afilar las brocas, y esto es importante cuando decides utilizar mechas muy viejas o que han sufrido grandes esfuerzos. De hecho, utilizar brocas estropeadas o sin afilar significa arruinar su trabajo y realizar perforaciones ineficaces. Llegados a este punto, hay que elegir entre dos soluciones: utilizar brocas nuevas o afilar las viejas. Sobre todo si se trata de brocas caras o difíciles de encontrar: sustituirlas no siempre tiene sentido desde el punto de vista económico.
Utilice el afilador de brocas
Hay varias formas de recuperar la eficacia de la broca, y no todas son fáciles de poner en práctica. Por ejemplo, se suele hablar de recuperar el perfil afilado de estas herramientas con una muela abrasiva. El disco gira y se acerca la hoja de la broca para afilarla. Mantener un ángulo de afilado preciso. Esta es una posibilidad, pero como bien puede imaginar, no es fácil proceder en esta dirección si no se dispone del equipo necesario y de las habilidades para comprender qué camino seguir.
Mi consejo para afilar brocas: utilice una herramienta adecuada. Puedes comprar afiladores con la tarea específica de reafilar varias brocas. Si quieres taladrar bien un agujero en vidrio, o quizá quieras perforar hormigón o hierro, tienes que optar por cuchillas eficaces. Las puntas están diseñadas para ser eficaces en un material concreto, pero el principio básico es el mismo: la hoja debe cortar.
Afilador de brocas: cómo utilizar esta herramienta
¿Desea afilar brocas de pared, hierro y madera? ¿Tiene brocas HSS que recuperar? Para eso es exactamente el afilador de brocas. Con esta herramienta podrá resolver el problema sin improvisar, sin arriesgarse a lesionarse (afilar una broca a mano sobre una muela abrasiva no es lo más seguro) y sin perder la mecha. Pero, ¿cómo se utiliza esta herramienta? En realidad es muy sencillo, basta con insertar la broca y seguir las instrucciones: unos instantes y su taladro podrá volver a utilizar sus mechas favoritas para taladrar madera, hierro, vidrio y hormigón.
La comodidad de un afilador de puntas radica en su pequeño tamaño: puedes sujetar esta herramienta al mostrador y tener siempre a mano una herramienta para reavivar tus puntas favoritas. Las cuales, cabe recordar, deben utilizarse siempre de la mejor manera posible para evitar que se estropeen:
- Utilice siempre las puntas adecuadas para el material.
- Asegúrese de disponer de un taladro de impacto para determinados trabajos.
- No ejerza demasiada fuerza sobre la punta.
- Compruebe si la punta está sobrecalentada.
- Utilice la mecha adecuada para hacer agujeros anchos, si es necesario utilice puntas de vaso.
Un consejo que siempre es válido: una vez afiladas las puntas, pruebe la eficacia de la herramienta en un elemento que no se corresponda con su trabajo final, pero que tenga las mismas características. El afilado no siempre tiene éxito, a menudo las mechas están demasiado dañadas y es mejor asegurarse del éxito de la operación antes de abordar la perforación. De lo contrario, corre el riesgo de estropear la superficie y provocar daños difíciles de recuperar. Especialmente si trabaja en madera, vidrio y objetos pequeños: en estos casos puede tener problemas evidentes con las puntas arruinadas.
Para leer: cómo elegir una broca
¿Has afilado ya tus brocas?
Afilar brocas no es una operación compleja si se tienen a mano las herramientas adecuadas. Algunas personas prefieren recuperar el perfil de las mechas con una muela abrasiva, mediante la erosión manual del metal. Pero ésta no siempre es la mejor opción, sobre todo si no se tienen los conocimientos necesarios para hacerlo. Con un buen afilador de brocas puedes resolver el problema en poco tiempo y con un gasto modesto. ¿Tienes algún otro consejo para quienes se mueven en esta dirección específica? Deja tu experiencia en los comentarios, ayúdame a mejorar la guía que acabas de leer.